Tabaquismo y Tratamiento
Cuando se habla de tratamientos para dejar de consumir tabaco, nos vienen a la mente muchas noticias y propestas al respecto.
El que es fumador y sobre todo sus familiares en algún momento se han interesado por métodos o tratamientos para poder librarse o librar a su ser querido de esta adicción.
Quien no ha escuchado alguna vez de métodos naturales, de determinadas hierbas, de aerosoles con sustancias que le provocarían un rechazo hacia el cigarrillo, libros que proponen un plan único y que serviría para que cualquiera que lo leyera dejara de fumar y otros como el famoso rayo láser.
Es probable que todos estos métodos o sistemas a algunas personas les hayan servido o ayudado a dejar de fumar, en realidad muchos funcionan como un placebo, o sea algo que “supuestamente cura”, en este caso curaría de la adicción al cigarrillo.
Es que en los casos en que estos métodos han sido exitosos, la persona ya había elaborado un proceso interno que lo colocó en la situación ideal para dejar de fumar y lo que necesitó para concretarlo fue un método o sustancia determinados.
Que en realidad podría haber sido cualquier método, digamos que este fue el disparador que permitió el cambio de conducta.
Ahora bien en una gran mayoría de casos estas metodologías no son efectivas, con ellas no se logra el objetivo que pretenden, por el simple hecho que no trabajan sobre la motivación interna de la persona, si esta se encuentra presente entonces funcionan de lo contrario no sirven.
¿Y que es la motivación? Para describirla de forma simple y entendible, no es más que “el deseo”, en este caso, es el deseo de dejar de fumar; el no quererlo más.
A nuestro buen entender todo tratamiento serio debe abordar por un lado la motivación para dejar de fumar y la dependencia psicológica al cigarrillo y por otro la dependencia química a la nicotina que actúa sobre el cerebro.
En el tratamiento que proponemos se abordan los dos frentes de conflicto para dejar de fumar y se trabajan ambos en forma simultánea.
Es por ello que el tratamiento, no es un método único sino que se lo personaliza según cada caso y la duración es variable también según las necesidades individuales de cada persona y de la gravedad de la adicción.
Estamos convencidos que cada intento por dejar de fumar es un paso hacia el logro final, por ello no consideramos los fallos anteriores como fracasos, sino como intentos positivos dado que siempre se produce un aprendizaje.
Nuestro tratamiento es de tipo “abierto”, dado que tiene por objetivo que la persona pueda dejar de consumir tabaco, pero también somos realistas y sabemos que hay casos particulares donde esto en una primera instancia no será posible.
En estos casos, nos daremos por satisfechos con una reducción sustancial de la cantidad de cigarrillos consumidos diariamente, con lo cual reduciremos en gran medida el daño provocado por el consumo del tabaco.
Quedando para una instancia posterior el abordaje del abandono definitivo de su consumo.
Aunque sabemos que en la mayoría de los casos la respuesta es totalmente positiva en la primera instancia.
Consideramos que la posibilidad de cambio siempre acompaña a la persona. Consideramos que el atreverse a buscar el camino para cambiar es una de las tareas más fascinantes de la vida.
La mayoría de las veces el cambio está a nuestro alcance y generalmente cuando lo logramos, luego decimos “pero como no lo hice antes”.
Atrévase a cambiar, deje de fumar, por usted y por su familia.